La ensaladilla rusa es un plato que ha conquistado paladares en todo el mundo, pero su origen se remonta a la famosa ensalada Olivier, creada en el siglo XIX por un chef belga en Rusia. Este plato es un clásico en muchas mesas, especialmente en celebraciones y reuniones familiares. Su combinación de ingredientes frescos y su textura cremosa la convierten en una opción ideal para cualquier ocasión.
La ensaladilla rusa se caracteriza por su versatilidad. Aunque los ingredientes básicos son patata, huevo cocido y mayonesa, se pueden añadir otros elementos como zanahoria, guisantes, atún o pimiento morrón, dependiendo del gusto personal. Esta flexibilidad permite que cada hogar tenga su propia versión, adaptándose a las preferencias de cada comensal.
En este artículo, exploraremos cómo preparar una ensaladilla rusa de matrícula de honor. Desde la selección de ingredientes hasta los secretos de una mayonesa casera perfecta, aquí encontrarás todo lo que necesitas saber para disfrutar de este delicioso plato.
Ingredientes esenciales para la ensaladilla rusa

Para preparar una ensaladilla rusa deliciosa, es fundamental contar con los ingredientes adecuados. Los elementos básicos son:
- Patatas: Son la base de la ensaladilla y aportan una textura suave. Es recomendable elegir patatas de buena calidad, preferiblemente de tipo harinoso, que se cocen bien y se deshacen fácilmente.
- Huevos cocidos: Aportan proteínas y un sabor característico. Es importante cocerlos correctamente para que queden firmes pero no duros.
- Mayonesa: Este es el elemento que une todos los ingredientes. Una buena mayonesa casera puede elevar el sabor de la ensaladilla a otro nivel.
Además de estos ingredientes, puedes considerar añadir:
- Zanahorias: Aportan un toque dulce y colorido.
- Guisantes: Añaden frescura y un ligero crujido.
- Atún: Para un extra de sabor y proteínas.
- Pimiento morrón: Aporta un toque de color y un sabor distintivo.
La elección de los ingredientes es crucial para lograr una ensaladilla rusa equilibrada y sabrosa. Asegúrate de que todos los ingredientes estén frescos y de buena calidad para obtener el mejor resultado.
Pasos para una cocción perfecta
La cocción de los ingredientes es uno de los pasos más importantes para conseguir una ensaladilla rusa perfecta. Comienza por cocer las patatas y las zanahorias con piel. Esto ayuda a mantener su sabor y nutrientes. Coloca las patatas y zanahorias en una olla con agua fría y un poco de sal, y cocina a fuego suave. La cocción lenta permite que los ingredientes se cocinen de manera uniforme.
Una vez que las patatas y zanahorias estén tiernas, retíralas del fuego y déjalas enfriar un poco antes de pelarlas. Es recomendable rallarlas en lugar de cortarlas, ya que esto ayuda a que se integren mejor con la mayonesa y los demás ingredientes, logrando una textura más cremosa. Rallar también permite que los sabores se mezclen de manera más efectiva.
Mientras tanto, hierve los huevos en otra olla. Colócalos en agua fría y llévalos a ebullición. Una vez que el agua hierva, reduce el fuego y cocina durante unos 10 minutos. Después, enfría los huevos en agua fría para detener la cocción. Una vez fríos, pélalos y pícalos en trozos pequeños. La combinación de todos estos ingredientes cocidos y bien preparados es clave para una ensaladilla rusa que impresione a todos.
Consejos para una mayonesa casera ideal
La mayonesa es el alma de la ensaladilla rusa, y hacerla en casa es más fácil de lo que parece. Para preparar una mayonesa casera ideal, necesitarás:
- Aceite de oliva: Utiliza un buen aceite de oliva virgen extra para un sabor más intenso.
- Yemas de huevo: Asegúrate de que estén frescas.
- Mostaza: Un poco de mostaza puede ayudar a emulsionar y dar un toque de sabor.
- Sal y limón: Para sazonar y equilibrar los sabores.
Comienza colocando las yemas de huevo en un bol y añade una cucharadita de mostaza. Bate con un batidor de mano o una batidora eléctrica. A continuación, comienza a añadir el aceite de oliva poco a poco, en un hilo fino, mientras sigues batiendo. Este paso es crucial, ya que si añades el aceite demasiado rápido, la mayonesa no emulsionará correctamente.
Una vez que la mezcla comience a espesar, puedes añadir el aceite un poco más rápido. Cuando hayas incorporado todo el aceite, añade sal y un chorrito de limón al gusto. La mayonesa debe ser cremosa y suave. Si deseas, puedes ajustar la cantidad de limón o sal según tu preferencia. Esta mayonesa casera no solo es perfecta para la ensaladilla rusa, sino que también puede ser utilizada en otros platos.
Conclusión
La ensaladilla rusa es un plato que combina tradición y sabor, ideal para compartir en cualquier ocasión. Con los ingredientes adecuados y siguiendo los pasos correctos, puedes preparar una ensaladilla que dejará a todos con ganas de más. Recuerda que la clave está en la calidad de los ingredientes y en la atención a los detalles durante la cocción y la preparación de la mayonesa.
No dudes en experimentar con diferentes ingredientes y proporciones para encontrar la versión que más te guste. Sirve tu ensaladilla rusa a temperatura ambiente, acompañada de pan o picos, y disfruta de este delicioso plato que seguramente será un éxito en tu mesa.
¿Te animas a preparar tu propia ensaladilla rusa? ¡Comparte tus resultados y tus variaciones en los comentarios!