La picaña es uno de los cortes de carne más apreciados en la parrilla, especialmente en la cocina argentina. Este corte, conocido por su jugosidad y sabor, se ha convertido en un favorito tanto para los amantes de la carne como para los chefs profesionales. En el programa “Maestros del asado”, el chef argentino Christian Petersen comparte su experiencia y técnicas para preparar una deliciosa picaña a la parrilla. En este artículo, te guiaremos a través de los pasos esenciales para lograr una picaña perfecta, desde la preparación de la parrilla hasta el momento de servir.
Asar carne no es solo una técnica, es un arte que requiere atención al detalle y un poco de práctica. La forma en que se prepara la parrilla, se corta la carne y se condimenta puede marcar la diferencia entre un plato mediocre y uno excepcional. Si deseas impresionar a tus amigos y familiares con una comida memorable, sigue leyendo para descubrir los secretos de la picaña a la parrilla.
Además, aprender a asar carne es una habilidad que puede enriquecer tus reuniones y celebraciones. La picaña, con su sabor intenso y su textura tierna, es ideal para cualquier ocasión, ya sea un asado familiar, una reunión con amigos o una celebración especial. Así que, ¡manos a la obra!
Preparación de la parrilla
La preparación de la parrilla es un paso fundamental para garantizar que tu picaña se cocine de manera uniforme y adquiera ese sabor ahumado característico. Antes de comenzar a asar, es crucial asegurarse de que la parrilla esté limpia y lista para usar. Esto no solo ayuda a evitar que la carne se pegue, sino que también asegura que los sabores de la carne no se vean alterados por residuos de asados anteriores.
Para limpiar la parrilla, utiliza un cepillo de acero para eliminar cualquier resto de comida o grasa. Es recomendable hacerlo mientras la parrilla aún está caliente, ya que esto facilita la limpieza. Una vez que la parrilla esté limpia, es hora de encender las brasas. Puedes optar por carbón o leña, dependiendo de tu preferencia. Ambos aportan un sabor único a la carne, pero el carbón es más fácil de manejar para principiantes.
Al encender las brasas, asegúrate de que estén bien distribuidas y que alcancen una temperatura adecuada. La temperatura ideal para asar picaña es alta, ya que esto permitirá que la carne se dore rápidamente por fuera, sellando los jugos en su interior. Una vez que las brasas estén listas, estarás un paso más cerca de disfrutar de una deliciosa picaña a la parrilla.
Limpieza y encendido de brasas
La limpieza de la parrilla y el encendido de las brasas son dos aspectos que van de la mano y son esenciales para un asado exitoso. Comienza por asegurarte de que la parrilla esté completamente fría antes de limpiarla. Utiliza un cepillo de cerdas duras para eliminar cualquier residuo de grasa o comida. Si hay manchas difíciles, puedes usar un poco de agua caliente y jabón para facilitar la tarea. Recuerda enjuagar bien y secar la parrilla antes de usarla.
Una vez que la parrilla esté limpia, es momento de encender las brasas. Si decides usar carbón, coloca una cantidad generosa en el centro de la parrilla y utiliza un encendedor de carbón o papel de periódico arrugado para iniciar el fuego. Si prefieres la leña, asegúrate de que esté seca y bien cortada para facilitar la combustión. La clave es permitir que las brasas se calienten hasta que estén cubiertas de ceniza blanca, lo que indica que están listas para cocinar.
Es importante tener en cuenta que la distribución de las brasas también influye en la cocción de la carne. Puedes crear zonas de calor directo e indirecto, lo que te permitirá dorar la picaña y luego cocinarla a fuego más bajo para que quede jugosa. Una vez que las brasas estén listas y bien distribuidas, estarás preparado para el siguiente paso: la preparación de la picaña.
Técnicas de corte y condimentación
La técnica de corte y la condimentación son dos elementos clave para resaltar el sabor de la picaña. Antes de comenzar a asar, es fundamental retirar la telilla que recubre la carne. Esta membrana puede ser dura y no se descompone durante la cocción, por lo que es mejor quitarla para asegurar una textura más tierna. Utiliza un cuchillo afilado y realiza cortes suaves para no dañar la carne.
Una vez que hayas retirado la telilla, es hora de hacer cortes en la grasa de la picaña. Esto no solo ayuda a que la grasa se derrita y se integre en la carne durante la cocción, sino que también permite que los condimentos penetren mejor. Realiza cortes en forma de rombo, asegurándote de no llegar a la carne. Esto creará una presentación atractiva y mejorará la caramelización durante el asado.
En cuanto a la condimentación, Christian Petersen recomienda utilizar sal gruesa como el único condimento para resaltar el sabor natural de la picaña. Espolvorea la sal de manera uniforme sobre toda la superficie de la carne, asegurándote de cubrir tanto la parte de la grasa como la de la carne. La sal ayudará a formar una costra deliciosa durante la cocción, manteniendo los jugos en el interior. Una vez que la picaña esté lista, colócala en la parrilla, comenzando por el lado de la grasa.
Conclusión

Asar una picaña a la parrilla es una experiencia gratificante que combina técnica, paciencia y pasión por la cocina. Siguiendo los consejos de Christian Petersen, desde la limpieza de la parrilla hasta la correcta condimentación de la carne, podrás disfrutar de un plato delicioso que seguramente impresionará a tus invitados. Recuerda que la clave está en la atención a los detalles y en permitir que la carne repose antes de servirla.
Una vez que la picaña esté cocida a tu gusto, retírala de la parrilla y déjala reposar durante unos minutos. Esto permitirá que los jugos se redistribuyan, asegurando que cada bocado sea tierno y jugoso. Puedes servirla en una tabla de madera o en una fuente, acompañada de tus guarniciones favoritas, como ensaladas, papas asadas o chimichurri.
No dudes en experimentar con diferentes técnicas y acompañamientos para encontrar tu combinación perfecta. La cocina a la parrilla es un arte que se perfecciona con la práctica, así que no te desanimes si no sale perfecto a la primera. ¡Anímate a probar y disfruta del proceso! Si te ha gustado este artículo, comparte tus experiencias y recetas en los comentarios. ¡Feliz asado!